El dolor de la población ucraniana también es nuestro y nos pone en marcha para actuar rápidamente y lograr acompañar en estos momentos tan críticos. Nos unimos a la intención del Papa que nos pide oración y ayuno para “estar cerca del sufrimiento del pueblo ucraniano, para sentir que todos somos hermanos y para implorar a Dios el fin de la guerra”. Ya son cerca de un millón de personas las que se han visto obligadas a abandonarlo todo y huir hacia los países vecinos.
Es una campaña conjunta de Alboan y Entreculturas, y en el marco de la red Xavier, para ayudar a las personas más vulnerables, a los hombres y a las mujeres que vuelven a tener que enfrentarse a la guerra y a la violencia frente al deseo de paz y de diálogo para sus vidas. Con los fondos recaudados se apoyará el trabajo del JRS Europa con programas de acogida y atención a las personas víctimas de este conflicto en Polonia, Rumanía y Hungría, en una primera línea, y en Bosnia-Herzegovina, Croacia, Kosovo, Macedonia y Serbia, en una segunda línea.